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RELOJES DE ORO AUTOMÁTICOS


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Los relojes de oro automáticos han capturado por generaciones la atención de los amantes de los complementos de lujo. Estas exquisitas joyas mecánicas combinan tradición y modernidad para crear obras maestra únicas. Además, los materiales usados en su confección, garantizan piezas maravillosas que harán vibrar los sentidos de los clientes más exigentes. Todo esto, con el aporte de elegancia, sofisticación y clase a sus afortunados usuarios.


Los relojes de oro automáticos nunca pasan de moda

Aunque en los últimos años ha habido un gran avance en los relojes electrónicos, tanto a pilas como energía solar, convirtiéndolos en ejemplares modernos muy prácticos, precisos y fáciles de mantener.

Sin embargo, los relojes de oro automáticos, no constituyen únicamente dispositivos fabricados con el objetivo de marcar el paso del tiempo. Sino que en realidad, son verdaderas obras de arte, plasmadas como joyas únicas, capaces de complementar y potenciar la apariencia y el estilo.

Además, en la época en la que vivimos actualmente, sus credenciales ecológicas, son cada vez más notorias. Se puede argumentar que los relojes automáticos, son menos dañinos para el medio ambiente. Ya que no contienen sustancias químicas de cuidado, al no usar baterías ni celdas de almacenamiento de energía. Y que su durabilidad es mucho mayor, ya que pueden recibir mantenimiento muchas veces durante su vida útil.


Diseños de relojes automáticos de oro que están en vigencia

Aunque los diferentes fabricantes, se esfuerzan continuamente por lograr un diseño y fabricación de relojes de calidad. Con el fin de obtener una buena confiabilidad y la mejor exactitud. El tiempo suele posicionar ciertas tendencias de estilo, en función de diversas circunstancias.

  • Actualmente, son muy populares, aquellos ejemplares con la parte posterior de la caja en presentación transparente. De tal forma que el movimiento del mecanismo interno quede expuesto, cuando el reloj sea quitado de la muñeca.
  • Además, en los últimos años ha resurgido el movimiento esquelético en el que usted y los demás pueden ver lo que hay dentro del reloj mientras lo usan.
  • Para aquellos que no se contentan con un simple movimiento automático, existen funciones adicionales y complicaciones como zonas horarias adicionales, calendarios perpetuos y cronógrafos. Estas funciones aumentan significativamente el costo, la complejidad y el grosor del reloj. Como ejemplo, el cronógrafo agrega una capa de mecánica al frente del movimiento automático existente. El aumento de tamaño y peso de este tiende a verse mejor en una muñeca más grande para poder «llevar el look».
  • La razón principal de su popularidad es que a algunas personas les gusta apreciar lo que están usando y poseer un artículo de excelencia en ingeniería que dice mucho sobre la individualidad y el carácter del usuario. En esta era, el reloj no se trata solo de mantener el tiempo, ya que los dispositivos móviles y los relojes de cuarzo con pilas a menudo pueden hacer un mejor trabajo. El reloj es una declaración del aprecio de las personas por el arte y la artesanía.

Los relojes automáticos de oro, poseen una belleza interior, un sentido de historia, autenticidad y valor como ningún otro.


Desventajas de los relojes automáticos

  • Los relojes automáticos necesitan del movimiento de la muñeca de su portador, para mantener en marcha el mecanismo del reloj.
  • En comparación con los relojes electrónicos de actualidad, tienen cierta desventaja de precisión. Por lo general, su ajuste permite que se adelanten o retrasen un par de segundos por día. Esto significa que durante unas semanas pueden desigualarse incluso algunos minutos.
  • Idealmente deben usarse todos los días, o por lo menos el tiempo suficiente para que el mecanismo no caiga en reposo. Dependiendo del tipo de mecanismo, funcionarán entre 36 y 42 horas, sin que estén expuestos al movimiento. Lo que significa por ejemplo, que si se usan los días de trabajo y se quitan el viernes, el lunes habrán dejado de funcionar, y necesitará un reajuste de la hora y la fecha.

¿Cómo funciona un reloj automático?

En esencia, los relojes automáticos basan su funcionamiento, en el principio de transformar la energía cinética en energía potencial.

Explicado de una forma muy superficial, esto se consigue con la utilización de un medio disco de metal con peso en el borde llamado rotor. Dicho elemento gira cuando el brazo del usuario, en torno al cual se encuentra el reloj, se acelera de manera súbita. Es decir, cuando está expuesto a los movimientos naturales producto de la vida diaria.

El movimiento giratorio en cuestión, activa el resorte principal, el cual se enrolla en el eje central del cañón, sin estar unido rígidamente al exterior de este último. En cambio, hay una serie de retenes a lo largo del borde exterior del cañón, que permiten que una parte del resorte principal de construcción rígida llamada brida se deslice cuando se intenta enrollar. En algunos relojes, se puede escuchar un leve clic cuando esto sucede.


¿Qué tipo de mecanismo elegir en un reloj automático?

En caso de que su presupuesto sea apretado, le recomendamos un mecanismo suizo. Eso sí, que sea de un fabricante conocido.

Los más populares son los de Sellita y ETA. Los movimientos ETA se pueden encontrar en la mayoría de Tissot, Certina, Hamilton, Rado, Longines y Omega’s.

Los Tissot, Certina y Hamilton proporcionan la mejor confiabilidad y precisión al precio adecuado. Estas marcas se benefician tanto de la experiencia de la industria suiza como de ETA sin el precio de los relojes de alta gama.